La actual situación de
las relaciones Estados Unidos – Cuba se caracteriza por un mejoramiento
ostensible de las contradicciones que
durante casi 6 décadas se desarrollaron de manera aguda sin que se
descartaran las acciones violentas, por
cuanto los gobiernos de turno de esa gran potencia organizaron y llevaron a vía
de hechos las agresiones armadas, la guerra bacteriológica, la guerra económica,
la guerra química, los sabotajes a la economía del país, los atentados a los
máximos dirigentes de la revolución, la guerra psicológica y muchas otras formas de agresión, que no
pueden denominarse pacíficas.
El ex